La mariposa negra entra en mi pieza
y golpea contra el techo.
Golpea contra el techo.
Golpea contra el techo.
Ella y su sombra.
Luego da unas vueltas en círculo. Locamente.
Representa una especie de número de circo
alrededor del ventilador apagado.
Por un momento parece más de una.
Al menos dos.
En una última acrobacia, atraviesa la luz
y se posa en una de las aletas del ventilador.
Tal vez crea que es su madre.
4 comentarios:
me mató el final!!! Genio!
ohhh buscando su abrazo maternal...pobre mariposa que reposa sobre el ala!
Analía queridaaa, muchas gracias. Van besos y abrazos para vos.
Bohemia ¡tanto tiempoo!. Muchas gracias. Espero estés muy bien. Besos.
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