domingo, mayo 28, 2006

La orquesta

En la vidriera de la casa
de venta de instrumentos musicales
un piano sonríe a quien quiera
mirarlo.

Una guitarra colgada oficia
de lira. Más atrás
brillan trompetas y saxofones
a la espera de un soplido.

En la vereda,
el limpiador de vidrios dirige
la orquesta.

Ingreso

Una mujer hermosa
entra al poema

Me acomodo en la silla,
muestro mi mejor perfil
pero advierto que no llevo
puesta mi camisa.

Tacho la palabra rubor
pero ya es tarde.

En el campo

Unas abejas tejiendo
una galaxia invisible
en el aire.

Un caballo
con montura de lujo
prófugo de una calesita.

Un viejo buey
con ojos de barco.

Un palo borracho
excedido de peso
al que unas rosas
le encomendaron sus espinas.

A las U les llaman herraduras.

Las espuelas están compuestas
por asteriscos.

Temblores

Escuché en el noticiero
de esta noche
que a la mañana un temblor
había sacudido algunas zonas
de Buenos Aires
justo en el mismo instante
en que me decías que no.

Venganza

Mi venganza es que un día
un verso mío te dé alcance
y te desnude por completo
cuando camines por la calle.

domingo, mayo 21, 2006

POEMAS DE PIZARNIK, AGUIRRE Y BELLESSI

SOMBRA DE LOS DIAS A VENIR


Mañana
me vestirán con cenizas al alba,
me llenarán la boca de flores.
Aprenderé a dormir
en la memoria de un muro,
en la respiración
de un animal que sueña.

Alejandra Pizarnik



MEJOR AQUI


Mejor aquí, en el medio
de un día como otro,
bien comenzado, con lugares
y personas precisos,
con relojes, con ropas
y zapatos bien puestos,
con buenas perspectivas.

Mejor aquí, en el medio
de un día que se irá
sin nadie.

Crúzate en mi camino,
hazme una zancadilla:
que yo caiga y comprenda.

Raúl Gustavo Aguirre



LA VOZ DE LOS VENCIDOS


Círculos de mojarras
sobre el espejo oscuro
del arroyito seco
Nítidos primero y
concéntricos, abriéndose
hasta perderse en ondas
mansas de la marca
Un ladrido y luego
hechizos de calandria
Así se mueve, si,
el universo y vos
ahí, ondas de la frase
en voz tan queda, yerba
buena, no se lava en
los silencios, espuma
que perdura al tranquito
de la charla moviéndose
en círculos concéntricos
por la tarde infinita
Hasta luego, amigo
mío hasta la victoria
siempre

Diana Bellessi

domingo, mayo 14, 2006

Viaje en ómnibus

El ómnibus nos conduce
a que seamos tragados por el
paisaje. A los lados
la vegetación crece como espuma.
¿El cielo? Un cielo raso compuesto
de una sola nube enorme y devastadora.
No, el sol no da señales de vida.
Para colmo estamos de vacaciones
y no hay quien quiera dibujarlo.

Ejercicio de memoria

Una tormenta
que se lleve nuestros nombres,
el nombre de las cosas y
todas las palabras, nos depositaría
por un tiempo en la prehistoria.

Todo el mundo caminando
como los hombres-libro de Bradbury.

Lo real

Caminamos de la mano
por veredas sinuosas que acaban
en un perro mojado por la
lluvia. El perro gotea
como recién pintado. Los
carteles dispuestos a ambos
lados de la calle
entorpecen la nostalgia.

POEMAS DE DICKINSON, FUERTES, GAVIRIA y BLAS DE OTERO

La araña sostiene una pelota de plata
en desapercibidas manos -
y danzando suavemente sobre sí misma
su hilado de perlas – desovilla -

aplica nudo tras nudo -
en insubstancial labor -
suplanta nuestro tapiz con el suyo -
en la mitad del tiempo -

una hora en cultivar
sus continentes de luz -
luego penden de la escoba del ama de casa -
sus confines – olvidados -

[ Sin título ] Emily Dickinson



CRISTALES DE TU AUSENCIA


Cristales de tu ausencia acribillan mi voz,
que se esparce en la noche
por el glacial desierto de mi alcoba.
-Yo quisiera ser ángel y soy loba-.
Yo quisiera ser luminosamente tuya
y soy oscuramente mía.

Gloria Fuertes


SPOON RIVER


Nací para grabar
esta inscripción
en mi lápida.

Y ahora, cumplido
mi propósito,
no logro descifrar
lo que desde aquí
se ve al revés.

Jesús Gaviria


PATO


Quién fuera pato
para nadar, nadar por todo el mundo,
pato para viajar sin pasaporte
y repasar, pasar, pasar fronteras,
como quien pasa el rato.
Pato.
Patito vagabundo.
Plata del norte.
Oro del sur. Patito danzaderas.

Permitidme, Dios mío, que sea pato
¿Para qué tanto lío,
tanto papel,
ni tanta pamplina?
Pato.

Mira, como aquél
que va por el río
tocando la bocina…

Blas de Otero

miércoles, mayo 10, 2006

Poemas de Giannuzzi, Pessoa y Prévert

AUTOCRITICA

El sol ocupa toda la tarde
Estoy solo y lírico en la tarde
Estoy hecho un amarillo poema perfecto
Pero en lugar de escribirlo
Enviudé mi juventud
Me aseguré el tabaco y el café
Una a una he chupado las costillas de la estética
Pero el jugo secreto no me fue revelado
No encuentro un personal sistema de lenguaje
Quiero decir un acto de escritura
Que mis contemporáneos interpreten adecuadamente mal.

Joaquín O. Giannuzzi


Bajo la leve tutela
de dioses indolentes
quiero gastar las concedidas horas
de esta vida predestinada.

No pudiendo nada contra
el ser que me hicieron,
deseo al menos que me haya el Hado
dado la paz por destino.

De la verdad no quiero
más que la vida, pues los dioses
no dan verdad sino vida, y acaso
ni sepan cuál es la verdad.

Fernando Pessoa [ Ricardo Reis ]



DIA FRANCO


Guardé mi kepí en la jaula
y salí con el pájaro en la cabeza
De modo que ya
no se saluda
preguntó el comandante
No
ya no se saluda
contestó el pájaro
Ah bien
discúlpeme creí que se saludaba
dijo el comandante
está usted disculpado todo el mundo puede equi-
vocarse
respondió el pájaro.


Jacques Prévert

domingo, mayo 07, 2006

Los poemas de Musas Extraviadas...

Los poemas hasta aquí publicados en Musas Extraviadas: Experimento, Vuelo, En el diario, Las campanas y otros, pertenecen a un libro que aún no tiene nombre y, por ahora, tampoco final. Poemas no exentos de cierto humor e ironía, donde existe una valorización de los objetos, son, en conjunto, un juego, una diversión en el mejor sentido como así también un canto a lo gratuito, lo inútil. Al menos esto es lo que yo me proponía al escribirlos. Aunque en muchas ocasiones no pretendía nada . Escribir, solamente escribir.

Mas adelante publicare en este blog poemas de Disfraz al agua, 1998, En la orilla, 2002-2003, y algunos poemas sueltos.


Máximo Ballester

lunes, mayo 01, 2006

Las campanas

A las seis de la tarde
entra al living
el tañido de las campanas
del Santa Isabel. En conjunto
sonidos graves y alegres. Aunque
de una alegría ciertamente obispal.


Dejemos a los obispos.
Prefiero pensar que Quasimodo
esta’ de buen humor.

Estrategia de seducción

El poema se sustrae.
No da ventajas.


Calla como un muro
se cierra en un punto.
se hace el muerto.


Ensayo una estrategia.
Dispongo las manos
como si cargara una gran
bolsa pesada y le pregunto


¿Dónde pongo toda esta belleza?

Y el poema abre un ojo.

Loco, loco, loco

La luna que rodaba por
Callao, dobló por Corrientes
hasta 9 de julio.


Allí el obelisco
era un cohete en la luna.

Como obtener una foto de un murcielago surcando la luna

Tomar un viejo paraguas negro,
retorcerlo, desvencijarlo, aplastarlo
contra el piso, quitar el mango.


Elegir una noche de luna llena.
Salir al jardín con el paraguas roto
y una cámara fotográfica.


Arrojar el paraguas al aire directo
a la luna y tomar una fotografía.


Hacerle creer a todos que la foto
es de un murciélago surcando la luna.

La polilla

La polilla da saltos
en el techo
rebota en su sombra.


Se oculta
en el ventilador apagado.

Cree que es su madre.

Toilette

Observamos que el cuadro
es todo de madera.


De igual marrón en los
marcos.


Una figura plana –sin
rasgos- de un hombre
a la altura de los ojos.


Un picaporte dorado
a la altura de las manos.

Es asi

El poema sabe de sobra
quien lo escribe,
conoce sus arrebatos, sus manías,
la frente sostenida por la mano
que soporta el codo; los ojos en
nada.


Al poema poco le importa
el ser abstraído, inclinado sobre
el papel, que duda y se pregunta
una vez más si no estará bajando
el tobogán por el lado de la escalera.