martes, octubre 19, 2010

la mosquita del café

esa mosquita
que hacía círculos
ochos acostados
y que de pronto se le daba
por rebotar de cuerda a cuerda
de un ring invisible
se habrá preguntado
qué es el amor
cuando yo tenía tus manos
sobre la mesa del café
y las besaba agarrándome de vos
como si fueras la última ramita
del último árbol
allá bien arriba
en la montaña del fin del mundo

15 comentarios:

Calma en días de tormenta (Darilea) dijo...

Curiosa la mosquita no quería perderse detalle de ese momento :-)
Un beso Máximo

**VaNe** dijo...

yo que usté, entonces, me hubiera preguntado qué misterioso infinito estaría dibujando la mosquita en esos ochos
Beso Gigante!

Paloma Zubieta López dijo...

Sólo usté, don Máximo, consigue volar de la mosquita a la mesa del café y hablarnos de amor en la montaña del fin del mundo... *suspiros* Creo que me quedé volando en imaginaciones. Un beso enorme, volador pero que aterrice en tu mejilla.

Verónica Ruscio dijo...

Me gusta especialmente que hayas construido el poema poniendo el foco en la mosquita para hablar indirectamente de una pareja enamorada. Eso le quita lo cursi y profundiza el impacto.

Saludos.

Romina E. dijo...

Me encantó! muy tierno

fgiucich dijo...

Justamene, eso es el amor. Que andes bien. Abrazos.

Ana Silvia Mazía dijo...

Max, no lográs defraudarme ni aunque lo intentes, ¿eh?
Siempre magia.
Sólo mirá bien dónde pisas.
Abrazonón

Maria Coca dijo...

Qué maravilla de sensibilidad! Preciosa declaración de amor con mosca de por medio.

Besos, poeta.

Anónimo dijo...

que lindo eso de como si fuera la ultima ramita.. me encanto... besos y te invito a conocer mi arte talvez no es tan dulce.

www.dennizu.blogspot.com

Cuiz dijo...

AAhh la vida.. la vida!
Abrazo amigo

Gingerale dijo...

hermoso Máximo.

Marina dijo...

qué bueno descubrir tu blog, saludos!

Unknown dijo...

Oréadas: Una mosquita fisgona, ja. Sí. Gracias, Charo. Un beso.

Vane: No lo pensé, qué chambón... debí contar los ochos que hizo a fin de develar el misterio. Gracias. Beso gigante.

Paloma: Era una mosquita vuelaimaginaciones, ja. Gracias Palomita querida. Besos con alas también.

Verónica: bueno, gracias. Buen análisis. Saludos.

Romina: ¡Gracias! Me alegro mucho.

Fernando: Qué grande, usted sí que sabe, amigo. Un abrazo al vuelo.

Unknown dijo...

Ana: Igual voy a ver si me las arreglo para defraudarte en algún momento, ja. ¡Gracias! Abrazo y beso.

María: Y... uno tiene que tener a mano una mosca si no cuenta con un as en la manga, ja. ¡Gracias! Besos.

Denni Zú: Gracias. Ya voy a pasar a ver tus cosas. Nos vemos.

Cuiz: La vida, el amor. qué sé yo... pero eso es. Gracias. Un abrazo.

Gingerale: ¡Gracias! Qué bueno verte. Que estés muy bien. Besos.

Cecilia: Pero yo te conozco con otro nombre, ja. Gracias. Voy a pasar por los tuyos. Besos.

Abril Lech dijo...

La clásica mosquita muerta...